VOS

Ni vos me buscas, ni yo te encuentro.

Ni vos me extrañas, ni yo te pienso.

Ni vos me esperas, ni yo desespero.

Ni vos me peleas, ni yo te enfrento.

Ni vos me odias, ni yo te detesto.

Ni vos me amas, ni yo te quiero.

Antonella.

lunes, 9 de mayo de 2011

Probablemente

La punta de tus dedos recorriendo el largo de mi espalda provocándome la sensación de querer frenar el tiempo en el instante que siento tu mirada profunda acariciando mi piel.
El silencio hecho música que entona las estrofas de nuestra respiración al unísono de la pasión.
Simplemente la magia de encontrarnos en esta vida que nos halaga con cada vez que nos cruzamos para unirnos en el momento que logramos sea infinito.
Lo dulce de la explosión de euforia y lo amargo de saber que no hay un contrato que renueve esta locura.
Las descargas eléctricas de tus besos que llegan a toparme con el cielo soñado que anhelo alguna vez decidas regalármelo sin fecha de vencimiento, con la tranquilidad inigualable de que hagas a mi lado tu sitio y dejes a mi alcance tus sueños para sentirme dueña, para tocar tu alma, para cuidar tus desvelos, aunque no más sea por unos instantes.
¿Será que nunca va a dejar de ser lo que es para ser lo que quiero? ¿Aunque con cada mirada te entregue mi historia? ¿Aunque con cada risa te lleves mi pasado? ¿Aunque con cada segundo a tu lado te regale años de vida?.
Probablemente nada cambie, probablemente nunca moldee el amor que me ofreces, probablemente no puedas darme más; pero seguramente cada vez que tengas un espacio para rellenar en mí voy a ser tu arcilla, voy a vibrar junto a ti, porque todo se resume en esa mezcla exquisita de fantasía y realidad que me regalas, porque estoy tallada a tu manera, porque compartimos mucho más que la pasión, porque nos une mucho más que el amor.
Antonella.